DATOS DEL LIBRO
Encuadernación: Tapa blanda bolsillo
Editoral: PLANETA
Lengua: CASTELLANO
ISBN: 9788408075769
SINOPSIS
En Mortal y rosa, sobrecogedora y tierna elegía de la infancia, Francisco Umbral evoca la muerte de su hijo. Desde la inhóspita revelación de la pérdida, el escritor construye un largo monólogo en que la muerte actúa como coartada maravillosa que convierte su pesadilla humana en una fuerza catártica y liberadora. Francisco Umbral procura el reencuentro en la evocación, y cada sensación es un continuo superar la existencia inerte, cada objeto una excusa para la reflexión: «sillas de paja infantil, graves mecedoras, caballos de crin celeste me preguntan por ti, se preguntan por ti.» Con «esta corporeidad mortal y rosa, donde el amor inventa su infinito» —verso de Pedro Salinas que preludia el texto—, el escritor aborda una cantata de belleza y originalidad máximas, que desborda todos los rencores, porque, como señala en una frase que bien pudiera glosar la obra, «el hijo es un relámpago de futuro que nos deslumbra. Por él, por mi hijo, he visto más allá, más adentro, y más lejos, y quizás, ay, eso basta».
OPINIÓN
Aunque no soy madre, no puedo imaginarme nada más duro que la pérdida de un hijo. Y este es el tema que trata Francisco Umbral en Mortal y rosa, y además, desde su propia experiencia: la muerte de su hijo.
En el momento de su publicación, en plena transición de la dictadura a la democracia, no se valoró este libro como se merecía. Sin embargo, ya son muchos los lectores que nos hemos dejado conmover por esta obra.
El hijo de Umbral falleció de leucemia a la edad de seis años. Era hijo único. A partir de su muerte, Umbral se volcó por completo en su carrera literaria.
Mortal y rosa supuso una ruptura en la literatura española, es una obra singular. El autor consigue transmitirnos desde el principio ese dolor y esa desesperación que siente. El lector podrá sentir el desasosiego de este padre que no sabe cómo afrontar esa pérdida, que no encuentra consuelo en ningún sitio.
Todo el libro es un monólogo interior de Umbral, que se dirige constantemente a su pequeño, ya ausente. Recuerda constantemente tiempos mejores, eleva a su hijo a lo más sagrado, cuya pérdida hace que el propio padre enferme también, de pena.
Quizá sería fácil caer en el sentimentalismo barato al tratar un tema tan delicado como este, pero Umbral no lo hace. Este libro parte de un diario escrito por el autor, un lugar íntimo, apartado, donde puede dialogar con su hijo.
La prosa de Francisco Umbral es excelente y muy cuidada. Se ha definido este libro como el mejor libro de prosa poética escrito en español. No soy quien para juzgar si realmente es o no es el mejor, pues aun me queda mucho por leer. Pero hay mucho de poético en la forma del autor de narrar pequeñas anécdotas cotidianas. Es, con seguridad, el libro del que más pasajes he subrayado (de hecho, anoté todos los fragmentos y frases que me gustaron especialmente en una libreta, y me ocuparon varias hojas).
En conclusión, nos encontramos ante un canto al absurdo de vivir, un libro totalmente desagarrador, un puñetazo en el estómago, si me permitís la expresión. Su lectura puede hacerse algo densa en ocasiones, es cierto. Sin embargo, compensa hacer el esfuerzo y conocer una obra estupenda.